Llega ya el fin de semana, vamos, que estamos ahí ya ya mismito y que mejor placer en los días libres que preparar un delicioso desayuno, como se suele decir, para los que más queremos, sí sí, claro claro… yo desde luego lo hago con mucho amor, pero porque me vuelven locas esos placeres dulce mañaneros, jeje, placer egoísta... Así que nada, para los que más queráis, vuestras pareja, familia, todo el patio y la casapuerta o para daros el gustazo a uno solito ahí van unos pancakes, más conocidos aquí como tortitas americanas, que estoy segura os van a encantar.
Ingredientes:
- 1 huevo
- 1 pizca sal
- 200 ml leche
- 20 gr azúcar
- 10 gr mantequilla fundida
- 140 gr harina
- 8 gr levadura
Cobertura:
- Mantequilla
- Sirope
- Azúcar glass
Bueno, empecemos por entender la clave de las tortitas y es que cuanto más esponjosas nos queden mejor es decir, que tenemos que meterle mucho aire a la mezcla, para ello, yo prefiero comenzar separando la clara de la yema y dejamos la clara en un plato aparte.
En un bol grande, mezclaremos la yema con la leche, el azúcar, y la mantequilla fundida hasta que esté todo bien ligado.
En su platito, batimos la clara con la pizca de sal con fuerza, hasta que doble su volumen y coja bastante aire.
Echamos la clara casi montada en el bol y añadimos la harina y la levadura.
Con movimientos envolventes y como siempre, con mucha delicadeza vamos mezclando todos los ingredientes hasta que nos quede una masa homogénea pero bien aireada.
Dejamos reposar unos 20 minutos. Este paso no es imprescindible pero sí tenéis tiempo hacedlo porque permitirá a la levadura fermentar un poquito aumentando el volumen de la mezcla.
Lo siguiente es engrasar la sartén, con espray si tenéis en casa o con una servilleta de papel, cogemos un poco de mantequilla y la untamos usando la servilleta por toda la sartén.
Ponemos a calentar la sartén a fuego medio y para hacer las tortitas añadimos un par de cucharadas de la mezcla para cada tortita. Caerá formando círculos, movedlo un poco hasta que queden como de un dedo de grosor.
Cuando empiece a burbujear pompas de aire en la superficie es momento de darle la vuelta, con un par de minutos por cada lado será suficiente.
Las vamos apilando en un plato según salga y llega el mejor momento, el baño. A mi me gustan como se sirven en América, con un trozo de mantequilla arriba y un buen chorro de sirope de arce, que se irán fundiendo y cayendo sobre vuestras tortitas.
Y se rematan con azúcar glass espolvoreado, pero oye, al gusto de cada uno, podéis echarles chocolate, caramelo, sirope de fresa, nata…. Mmmmmmm ya me están entrando ganas de hacerlas. Animaros y me contáis que tal.
¡Salud, alegría y repostería!
